Desde hace tiempo nos planteamos las redes sociales como herramienta educativa y analizamos la influencia positiva o negativa que pueden tener en los adolescentes. En las Jornadas de Educación Digital celebradas en Deusto a principio de este mes se han analizado, entre otros aspectos, los `Peligros de las Redes Sociales y de Internet´ que existen.
Las redes sociales son un fenómeno social que pone en valor la comunicación abierta, continuada, el intercambio de información y aproxima los valores colaborativos.
Sin duda conllevan riesgos asociados con la apropiación de datos personales, la suplantación de identidad y la utilización incorrecta de la información que muchas veces dejamos en Internet de forma poco cuidadosa.
Por ello, cuando tratamos con los adolescentes el uso de las TIC hay que abordar las posibles adversidades y el riesgo que suponen con sumo cuidado, con valor preventivo o detectando si algun@ se ha visto en una situación extraña.
Por eso, cuando incorporamos las TIC en la docencia para mejorar el rendimiento, para acercar los objetivos didácticos a los conocimientos y usos de los adolescentes ponemos en uso las Buenas Prácticas en el uso de las TIC para canalizar los conocimientos previos a veces difusos y para hacer visibles las ventajas y los inconvenientes que todo, incluso las T.I.C., tiene.
Creo que debemos contar con las redes sociales, conocer sus posibilidades y después elegirlas o no como medios de comunicación con nuestros amigos, familiares, compañeros y/o alumnos. No al revés.
Además, siempre que se elige se renuncia a algo y siempre que elegimos podemos equivocarnos. Puede ocurrirnos también con las redes sociales ... porque errare humanum est.
Las redes sociales son un fenómeno social que pone en valor la comunicación abierta, continuada, el intercambio de información y aproxima los valores colaborativos.
Sin duda conllevan riesgos asociados con la apropiación de datos personales, la suplantación de identidad y la utilización incorrecta de la información que muchas veces dejamos en Internet de forma poco cuidadosa.
Por ello, cuando tratamos con los adolescentes el uso de las TIC hay que abordar las posibles adversidades y el riesgo que suponen con sumo cuidado, con valor preventivo o detectando si algun@ se ha visto en una situación extraña.
Por eso, cuando incorporamos las TIC en la docencia para mejorar el rendimiento, para acercar los objetivos didácticos a los conocimientos y usos de los adolescentes ponemos en uso las Buenas Prácticas en el uso de las TIC para canalizar los conocimientos previos a veces difusos y para hacer visibles las ventajas y los inconvenientes que todo, incluso las T.I.C., tiene.
Creo que debemos contar con las redes sociales, conocer sus posibilidades y después elegirlas o no como medios de comunicación con nuestros amigos, familiares, compañeros y/o alumnos. No al revés.
Además, siempre que se elige se renuncia a algo y siempre que elegimos podemos equivocarnos. Puede ocurrirnos también con las redes sociales ... porque errare humanum est.
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